Si has tenido problemas relacionados con el comer y con la comida, como problemas digestivos, resistencia a la insulina, diabetes, síndrome de intestino irritable, complicaciones alimentarias y otros retos, las ACEs y el estrés tóxico podrían ser la causa.
El estrés tóxico puede afectar nuestro sistema digestivo y el metabolismo, y en algunos casos, causar problemas graves. Si esa ha sido tu experiencia, es posible que necesites la ayuda de un nutriólogo o un doctor.
Una parte muy importante de nuestro camino a la sanación, sin importar desde dónde empecemos, es comer conscientemente. A veces comemos mientras que estamos en piloto automático, pero poner atención puede hacer una gran diferencia, y también nos puede ayudar a disfrutar mucho más la comida.
Estas son 3 maneras de volvernos más conscientes acerca de nuestra comida y nuestra nutrición: